miércoles, 28 de julio de 2010

¿La loma o el llano en llamas?

Allá, en la frontera norte de la ciudad, se encuentra el inodoro de Lima, el vertedero o algo que se asemeja mucho al concepto de infierno, excavaciones profundas de más de 100 metros, huecos pestilentes que se llenan minuto a minuto de todo lo que la gran Lima desecha. Pero en medio de todo existe una luz de esperanza.

Qué tal curiosidad debe de tener uno para levantarse a las 5 de la mañana, tomar una ducha rápida, soportar ese especial frío de las mañanas, subir al auto, aún medio dormido y encaminarse a un viaje de más de una hora y media fuera de Lima, hacia el norte, mas allá de Comas, lejos de Los Olivos, pasando Puente Piedra, allá donde termina la Lima metropolitana. No es que por puro romanticismo me haya encaminado a ver el alba en las idílicas y verdes Lomas de Carabayllo, no, fui al encuentro de lo que nadie ve ni quiere ver, fui a ver lo que cientos de organizaciones mencionan y lo que muchos de nuestros políticos ignoran.

viernes, 2 de julio de 2010

La “programación” cultural del individuo, el fútbol y el dolor de estómago de Adolfo Hitler

¿Qué tiene que ver el equipo de fútbol alemán con la interculturalidad? ¿Por qué muchos de los conflictos sociales están ligados al desconocimiento de las distintas dimensiones culturales de las personas? ¿Qué es comunicación intercultural? ¿No es esa la clave para entendernos mejor en la era de la globalización?

El equipo alemán de fútbol ya no es, ópticamente hablando, lo que era antes. El juego sí sigue siendo el mismo, el estratégico, rápido, de pases largos y jugadas minuciosamente estructuradas. Yo me refiero a la “óptica” de los jugadores, de su apariencia, para no mencionar la palabra “raza” que quizá me obligue a profundizar y precisar términos que no entran en este post. El Sr. Marlon, portero de mi edificio, es un gran conocedor de la época trágica del Tercer Reich y nunca se pierde la oportunidad para preguntarme sobre Alemania. Le comentaba justamente, que la imagen clásica de aquellos fornidos, rubios y bien peinados atletas, estilizados por la talentosa y muy criticada fotógrafa y cineasta Leni Riefenstahl, ya no se ve reflejada en la actual selección de fútbol.